Qué es la placenta previa y cuál es su tratamiento | DKVofertas.es
El embarazo es una época muy delicada de la mujer. Hay que contar con chequeos médicos y pruebas de detección para conseguir un desarrollo normal del proceso. ¿Por qué tener un seguro médico en el embarazo?
¿Qué es la placenta previa?
Se conoce como placenta previa a un trastorno que se produce en el embarazo en el que la placenta se ha desplazado hasta obstruir total o parcialmente la abertura del cuello del útero. Esa abertura es el orificio por el que el bebé debe salir en el parto.
La placenta, en un embarazo normal, se tiene que desplazar hacia arriba dejando libre el cuello uterino. Estos desplazamientos se realizan en los primeros meses de embarazo, por lo que es a partir de la semana 20 cuando se diagnostica.
Tipos de placenta previa
Según como se sitúe la placenta cerca de la abertura del cuello uterino nos encontramos tres tipos:
- Placenta previa parcial: la placenta cubre una parte del cuello uterino.
- Placenta previa total o placenta previa oclusiva: la placenta cubre completamente el cuello uterino.
- Placenta previa marginal: La placenta está cerca del borde del cuello del útero, pero no lo cubre.
¿Cuáles son las causas?
No hay causas conocidas, pero padecer placenta previa tiene unos riesgos y factores de riesgo:
- Uterinos: cuando hay anomalías en el útero por cesáreas, embarazos previos, legrados o miomas.
- Aumento excesivo del tamaño de la placenta debido al tabaquismo o a embarazos múltiples.
¿Cuáles son los síntomas de la placenta previa?
El principal síntoma de placenta previa es el sangrado vaginal repentino e indoloro. En menor medida las embarazadas con placenta previa pueden tener contracciones uterinas dolorosas. Estos síntomas se suelen presentar a partir de la semana 20 de embarazo. La placenta previa se diagnostica mediante una ecografía.
Tratamiento
El médico especialista de tu seguro para embarazada valorará el riesgo de sangrado comparado con el riesgo de un parto prematuro para el bebé. Después de las 36 semanas, dar a luz al bebé puede ser el mejor tratamiento. Casi todas las mujeres con placenta previa total o marginal necesitan cesárea.
Si la placenta previa no es total te recomendaran reducir actividades, guardar reposo en cama y no tener relaciones sexuales. También hay otros tratamientos que se pueden recibir, como transfusiones sanguíneas y medicamentos para prevenir el parto prematuro.